octubre 24, 2024

El lavado de manos es tu primer escudo de defensa

Padre e hijo lavándose las manos

Desde que nos levantamos hasta que nos acostamos, nuestras manos tocan más superficies de lo que imaginamos: el celular, el teclado del computador, las manijas de las puertas, el transporte público, incluso las manos de los demás cuando los saludamos; en cada toque, se recolectan gérmenes que pueden poner en riesgo tu salud. La buena noticia es que puedes romper esta cadena de contagio con un gesto tan sencillo como el lavado de manos.

Aunque lo hacemos casi de manera automática, no siempre lo realizamos correctamente, y muchas personas ni siquiera lo hacen. Llegamos de la calle y no nos lavamos las manos, o salimos del baño y lo olvidamos. Un simple enjuague no basta para eliminar los gérmenes acumulados a lo largo del día. Este hábito, que a menudo pasamos por alto, es en realidad una de las herramientas más poderosas para prevenir enfermedades.

En este blog te contaremos cuáles son los errores más comunes al lavarse las manos y algunos consejos para que conviertas esta acción en tu mejor defensa. 

Qué no debes hacer

  • No frotar lo suficiente: uno de los principales errores que cometemos es pensar que solo con un enjuague rápido ya es suficiente. Sin embargo, para poder eliminar los gérmenes debemos frotar nuestras manos por mínimo 20 segundos.
  • Olvidar lavar partes importantes de las manos: muchas veces nos concentramos en lavar únicamente las palmas de las manos, pero hay otras partes que son igual de importantes. Debes frotar bien el torso de las manos, entre los dedos y debajo de las uñas. Estos son puntos donde los gérmenes pueden esconderse fácilmente.
  • No usar la cantidad adecuada de jabón: Usar demasiado jabón no solo puede dificultar el enjuague, sino que también supone un desperdicio de recursos. Por otro lado, si usas muy poco jabón, no generarás suficiente espuma, lo que es crucial para eliminar eficazmente los gérmenes y suciedad de tus manos. La cantidad ideal de jabón es aquella que cubre todas las superficies de las manos y permite frotarlas bien, asegurando una limpieza adecuada.
  • Lavarse las manos solo cuando estás visiblemente sucias: es un error común esperar a que nuestras manos se vean sucias para lavarlas. La realidad es que la mayoría de los gérmenes y bacterias son invisibles y se adhieren a nuestras manos después de tocar diferentes superficies. Es crucial lavarse las manos no solo cuando parece necesario, sino también en momentos clave: antes de comer o preparar alimentos, después de ir al baño, después de tocar animales o haber estado en lugares públicos. 
  • No secarse bien las manos: las manos húmedas son un entorno ideal para que las bacterias se multipliquen y se propaguen más fácilmente, por eso es importante secarlas completamente con una toalla de papel.

Qué sí debes hacer 

Ahora que sabes cuáles son los errores más comunes al lavarte las manos, es hora de aprender cómo hacerlo de manera correcta para maximizar sus beneficios. Seguir los siguientes pasos, establecidos por el Ministerio de Salud, no solo te protege a ti, sino también a quienes te rodean. 

  1. Mójate las manos con agua.
  2. Aplica jabón en la palma de tu mano; una cantidad suficiente para cubrir ambas manos cuando las frotes. 
  3. Frota las palmas de tus manos entre sí para crear espuma.
  4. Entrelaza los dedos y frota la palma de la mano derecha contra el dorso de la mano izquierda. Luego repite con la otra mano. 
  5. Frota las palmas de ambas manos con los dedos entrelazados, asegurándote de limpiar bien entre los dedos.
  6. Frota el dorso de los dedos de las dos manos.
  7. Con la palma de una mano, agarra el pulgar de la otra mano y frótalo con movimientos circulares. Cambia de mano y repite.
  8. Limpia las puntas de los dedos y debajo de las uñas. 
  9. Enjuágate las manos con agua para eliminar todo el jabón.
  10. Sécate las manos con una toalla desechable o de un solo uso para evitar la proliferación de gérmenes en las manos húmedas.
  11. Usa la toalla para cerrar el grifo. 

Otros consejos que debes tener en cuenta 

Además de lavarte las manos de manera correcta, aquí te dejamos algunos consejos adicionales que puedes seguir para asegurarte de que tus manos estén siempre libres de gérmenes:

  • Utiliza gel antibacterial cuando no tengas acceso a agua y jabón: revisa que el gel contenga al menos un 60% de alcohol para que sea más efectivo. Recuerda que esto no reemplaza el lavado de manos, pero es una buena opción. 
  • Evita tocarte la cara: aunque pueda ser difícil, tocarse la cara con las manos sucias es una de las principales formas en que los gérmenes ingresan a nuestro cuerpo. Evita el contacto con los ojos, nariz y boca. 
  • Desinfecta las superficies comunes: aunque laves tus manos, si vuelves a tocar superficies sucias como teclados, manijas o el celular, tus manos pueden volver a contaminarse. Asegúrate de limpiar regularmente estos objetos.

Más que una simple rutina, lavarse las manos es una gran herramienta para proteger nuestra salud. Con pequeños ajustes en cómo lo hacemos, podemos convertir esta acción diaria en una barrera contra infecciones y enfermedades. Recuerda que cuidar tus manos es un acto de prevención que te acompaña a lo largo del día, en cada interacción y contacto. Haz del lavado de manos un hábito consciente y estarás marcando la diferencia, no solo para ti, sino para todos los que te rodean.